Ok

En poursuivant votre navigation sur ce site, vous acceptez l'utilisation de cookies. Ces derniers assurent le bon fonctionnement de nos services. En savoir plus.

Suiza contra la inmigración: analisis

 

1319211145_0.jpg

 

 

 

Cuando que los suizos se pronunciaron, gracias al sistema unico en Europa de la “votacion popular!, en marzo de 2013 por un control de las salrios de los grandes ejecutivos de empresas, todos los partidos de izquierda aplaudieron:el pueblo suizo penso bine. ¿Pero cuando votaron contra los minaretes, por la expulsion de los criminales extranjeros, los mismos atacaron este sistema de referendum popular (perdon populista) que da la palabra al pueblo que “piensa mal”.

 

 

 

 

Con el referendum de febrero de 2014 para limitar la inmigración no es solamente la izquierda, sino la casi totalidad de la clase dirigente suiza la que se opone contra esta opinion popular “incongruente”. El pretexto, seudo económico consiste en decir que Suiza se va a aislar, pero la verdadera razon de la colera de las élites va mas alla: el pueblo a rehusado seguir a la oligarquia en sus delirios de apertura de fronteras. Sabidura popular contra estupidez. Reaccion bien fragile, hacia el pueblo soberano, es todavia debil frente a los poderosos.

 

 

 

El desprecio con el que han tratado los resultados del referendum suizo, las autoridades de Bruselas, los discursos periodisticos dominantes y una parte de la clase politica francesa. “Demagogia” y “populismo”, estos son los dos terminos mas frecuentemente utilizados por los clerigos bien pensantes para calificar los resultados del referendum que quiere limitar la inmigración.

 

La pretenciosa tecnocracias de la Union Europea a osado proferir amonestaciones y amenazaz contra Suiza. Fabius y el gobierno socialista francés (el mas inutil en resultados de toda Europa) realizaron comentarios despectivos sobre las consecuencias del referendum. Sin pensar en el respeto que un pais europeo debe a otro.

 

 

 

Bonita concepcion de la democraqcia donde la voluntad real del pueblo es desacreditada y deslegitimada. Es normal, ya que el referendum suizo pone en cuestion el dogma central de la inmigración libre e incontrolada, pilar de la ideologia dominante (pero no mayoritaria) que gobierna tanto la tecnocracia de la UE omo la mayoria de los gobiernos.

 



 

Los pseudo economistas predicen una catastrofe para la economia suiza (la única de Europa que no conoce el desempleo en masa) debido a las cuotas impuestas a la inmigración en función de las necesidades económicas del pais. Pero resulta que Canada y Australia practican la misma condición con éxito. Al contrario , el pueblo suizo, a la inversa de sus dirigentes, esta repleto de buen sentido economico. Desde que Suiza se unio a los acuerdos de Schengen, prohibiendo a un Estado controlas sus fronteras, la inmigración a explotado: 400.000 entradas por año en un pais de 8 millones de habitantes. Actualmente roza el 25% de extranjeros. Se ha llegado a un nivel que no debe sobrepasarse incluso si la mayoria esta compuesta de otros europeos.

 

En realidad el pueblo suizo ha dado muestras de perspicaia: por un lado juzga que la prospera economia suiza no tiene mas necesidad de trabajadores exteriores, incluso europeos, conforma la lei de utilidad marginal; el argumento de la falta de mano de obra domestica no se sostiene, como lo demuestra el ejemplo de Japón; de otra parte -y este es el punto mas importante- el referendum suizo antiinmigracion libre es preservar el pais contra este flagelo que destruye a Francia, es decir la inmigración de asentamiento extra europeo de no trabajadores, que tiene dos consecuencias: hundir la economia y la riqueza nacional bajo el peso de la asistencia social o de la economia sumergida, y desfigurar las raices e identidad del pueblo. Sin hablar de los problemas de seguridad y de multiples degradaciones del entrono de vida.

 

Esta plaga ha comenzado ya en Suiza, por supuesto sin llegar al nivel catastrofico de Francia. El pueblo (no las elites protegidas) se da cuenta en su vida cotidiana . Con la aceptacion de la instalación por cuotas, de trabajadores utiles a la oferta economica domestica, el pueblo suizo rechaza, de hecho, siguiendo a la UDC, la inmigración extraeuropea, musulmana en un 80%..Y sorprende a los oligarcas del sistema , no es una preocupación económica: el pueblo suizo rechaza dejarse invadir y mezclar, el pueblo suizo rechaza la ideologia dominante, el pueblo suizo sostiene su identidad.

Sobreenendido, es racista, es pecador, rehusa obedecer. Los suizos han manifestado, de manera subliminal (aunque una proporción debil del 50,3% de los votantes) que desean mantener sobre su territorio soberano su identidad europea. Esto es inaceptable para nuestros dirigentes que sueñan en otro mundo, el de su paraiso que sera un infierno..

 

 

 

Dar la palabra al pueblo por un referendum de iniciativa popular en todos los temas es muy peligros para la ideologia dominante. Ella prefiere “cambiar al pueblo” forzando la inmigración, legal o ilegal impuesta por todos los medios. La destrucción de la identidad europea es la orden de las elites etnomasoquista por una mezcla patologica de ideologia y dulce neurosis.

 

Pero no os inquieteis: el gobierno suizo , como las instancias de la Unión Europea, en el curso de negociaciones en tres años con Bruselas, van a hacer todo lo posible por vaciar de su sustancia la “votación “popular, como han abolido el No a la constitución europea del referendum de 2002. Espero que mi predicción se revele falsa y el pueblo helvetico resista, que su ejemplo sea seguido y que la flecha de Guillermo Tell logre su objetivo.

 



 

Guillaume Faye.

 

http://www.gfaye.com/la-suisse-contre-limmigration-analyse/

 

Les commentaires sont fermés.